ACTO III
Cuadro 6
Escena 2
Salón en una rica mansión de San Petersburgo. Los invitados bailan una polonesa y después vuelven a sus sitios, formando pequeños grupos y charlando.
El Principe Gremin dirigiéndose a Eugenio Onieguin:
¡El amor nos inflama a cualquier edad¡
es saludable tanto para el joven
que apenas comienza a descubrir el mundo
como para el hombre maduro
de pelo canoso
y endurecido por la vida.
Onieguin, amo a Tatiana
con el ardor de la juventud
¡Mi existencia discurría con tristeza
antes de que ella apareciera
como un rayo de sol apartando los nubarrones,
dándome felicidad, iluminando mis días¡
En este mundo de criaturas consentidas
de estúpida frivolidad:
en un ambiente de seres tristes y ridículos
prestos a juzgar con malevolencia;
de bigotes atildados
de sirvientes taimados
en un mundo de falsedad
e hipócritas engaños
de bajas calumnias,
de inquietudes estériles
de irritantes vanidades,
y de sórdidos cálculos
¡ella refulge como una estrella
por la noche en un cielo despejado
y se me muestra rodeada
por un radiante coro de ángeles¡
El amor nos inflama a cualquier edad¡
es saludable tanto para el joven
que apenas comienza a descubrir el mundo
como para el hombre maduro
de pelo canoso
y endurecido por la vida.
Onieguin, amo a Tatiana
con el ardor de la juventud...
¡Mi existencia discurría con tristeza
antes de que ella apareciera
como un rayo de sol apartando los nubarrones,
dándome felicidad, iluminando mis días¡
Eugenio Onieguin
Piotr Ilich Chaikovski (1840-1893)
Libreto del compositor y Konstantin S. Shilovski, basado en la novela homónima de Aleksandr Pushkin .
Fotografía: Ilustración de la portada del programa para el Teatro Real por Eduardo Arroyo.
4 comentarios:
Ópera tan trágica como inspirada. Vi esta producción en el cine transmitida desde París. Precioso cartel.
Un beso de nostalgia rusa.
¿El amor nos inflama a cualquier edad, incluso al canoso?
No estoy seguro: el erotismo si que inflama a los canosos, pero uno se acostumbra a domesticarlo porque si no puede acabar como un personaje de Philip Roth, y con estos pelos uno no está para más zarabandas.
petons: no oblidis que Carmen ens espera el 9-0
Bellísimo momento al que sin embargo, le falta la música y la voz de un buen bajo, para tocar el cielo.
Vols que ho canti jo, Quimet?
Traduzco: "¿Quieres que lo cante yo, Quinillo?" :))
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