martes, 31 de marzo de 2009

mirando hacia arriba, cuatro, punto y final.


Cuando se despertó ya era de noche, los días eran muy cortos en esa época del año, se preparó un café y recogió el periódico viejo que le había dado el chatarrero para envolver la tostadora. De una pasada leyó un pequeño titular; "la Unesco declara el año 2009 como el Año Internacional de la Astronomía"... parecía un capricho, siguió leyendo, - "Galileo Galilei hacía 400 años, había fabricado con sus propias manos el primer telescopio de uso astronómico, con el cual el italiano cambió radicalmente la visión humana del cosmos. Galileo descubrió lunas orbitando alrededor de Júpiter, y cráteres nunca observados en la Luna, demostrando que la Tierra no era el centro del universo en torno al cual todo giraba, tal y cómo se creía entonces"-.

Se acercó a la ventana y miró hacia arriba, tuvo que estirar mucho el cuello, parecía imposible pero si, allí estaba el cielo, entre su ventana del piso 24 y el altísimo edificio de enfrente...pensó que no parecía que hubiera estrellas ni galaxias, si acaso un gran agujero negro...


Arrastró una butaca frente a la tostadora, dejó a un lado las aspirinas y el vaso de agua, sintió que no las necesitaba, terminó el café y puso en marcha el ordenador y el teléfono móvil... después de revisor el correo y las llamadas perdidas, salió a la calle, decidida a ver la luna y si no pensó, alguna estrella encontraría.

cosas que pasan, Mirando hacia arriba.Tostadora connection. pfp



Fotografía: obra de Anselm Kiefer

lunes, 30 de marzo de 2009

tres, (mirando hacia arriba)


Aquella noche también llegó tarde a casa y también pasada de alcohol, se tiró a la cama rendida, comatosa, sin siquiera quitarse los zapatos, al cabo de unas horas de sueño profundo, le despertó bruscamente un golpe metálico en la cabeza, al abrir los ojos encontró entre sus brazos el objeto causante... dio un respingo en la cama y un poco asustada se incorporó sobre la almohada... en cuanto se le aclararon la vista y las ideas, se levantó y fue derecha a las aspirinas, dos de golpe -esta vez era terapia, tenía un dolor de cabeza espantoso-.


...



La tostadora era enorme, cuadrada, todavía conservaba cierto brillo de aquellos aceros inoxidables de los años sesenta, pero lo que le sedujo de ella fue la gran abolladura que obstentaba al otro lado del negro y grueso cordón eléctrico. El chatarrero que le vendió el trasto no sólo le aseguró que funcionaba sino que le hizo una demostración práctica; una tostada y luego un té que compartieron charlando sin prisas, -esto señorita, son "cosas que pasan", alguien tiene un pronto y¡¡ zas¡¡... la tostadora, la cafetera, una puerta, cualquier cosas es buena para descargar energía negativa, si, sale más a cuenta que unas sesiones de terapeuta añadió ella. Se tomó el té y la tostada, pagó y prometió volver en breve, había allí montañas de cacharros por descubrir. Subió de nuevo al autobús con la tostadora en brazos, envuelta en un periodico viejo.


...



Recogió la tostadora de encima de la cama y con ella en brazos entró en la dimunita cocina de su apartamento, buscó a derecha e izquierda donde dejarla, no le cabía, tendría que quitar el microondas o la licuadora gigante que nunca había utilizado... se giró hacia el salón otra vez, y en apenas tres segundos encontró el sitio, retiró con un codo la lámparita de mesa con pantalla verde berza, y dejó sitio a la enorme tostadora, desenchufó la lámpara y la dejó en el suelo, enchufó el grueso cable negro de la tostadora y retrocedió mirando despacio su nueva adquisición... Fue entonces cuando recordó a Duchamp y su "urinario"... ¡por fin lo entendía¡ y ya sin ninguna duda , decidió elevar de categoría a la tostadora y convertirla en "arte contemporáneo" con cable y todo, conectada a la red.


Volvió a la cama otra vez, se abrazó a la almoahada mucho más tranquila, y decidió dormir hasta las tantas...





Fotografía: obra de Wiliam de Kooning


viernes, 27 de marzo de 2009

mirando hacia arriba, dos


Llegó a casa de noche, muy tarde, pasada de alcohol y por agua, se quitó el dos piezas de Armani y lo metió en una bolsa de basura junto a los restos de una botella de ketchup y unos espaguetis olvidados encima de la mesa de la cocina en avanzado estado de petrificación.

Durmió toda la noche como si le hubieran puesto pentotal en vena. Al despertar por la mañana, resacosa, repitió la ceremonia de las aspirinas, se puso sus vaqueros más roñosos, se pintó poco y mal, dejó el pelo sin peinar, como siempre, mal cortado por ella misma en arrebatos de última hora frente al espejo con las tijeras de las uñas, se concedió una sonrisa, recordando que no obstante su pelo, marcaba tendencia en la oficina, -así de tonta era la gente- pensaban que el corte era obra de un peluquero última moda, se caló sus grandes gafas de sol, y entonces empezó a encontrarse algo mejor...

Sin saber que hacer, con todo el día por delante, salió a dar tumbos por la ciudad, seguía lloviendo y pasó el día de autobús en autobús, realizó la linea completa del 326 que paraba cerca de su casa, empalmó en el final de trayecto con el 620, y luego con el 187, para terminar en el 459, con la única compañía consciente de una caja de donuts y dos latas de cocacola, que fue comiendo y bebiendo, mientras miraba sin ver la ciudad a través del cristal del autobús correspondiente.

A media tarde dejó de llover y decidió bajarse a tomar un café en un barrio desconocido y cutre a las afueras ...




Fotografía: obra de Philip Taafle

miércoles, 25 de marzo de 2009

mirando hacia arriba, uno


Por suerte no tengo, ni padre, ni madre, ni perrito que me ladre, -pensó, sacándose la lengua delante del espejo, cogió un poco de agua en un vaso desechable y se tragó un par de aspirinas de golpe, medida profiláctica por si le daba “algo”.

Acababa de pactar "su despido improcedente", le daba derecho a dos años de paro… Después de casi diez años de trabajo, después de montar toda la estructura de la Empresa y un equipo competente y profesional, ... sin escatimar tiempo, había hecho jornadas de catorce horas, había prescindido de fines de semana, había regalado vacaciones… no se engañaba, le había costado su matrimonio... y de pronto nombraban un capullo de Presidente nuevo, con el que no se entendió desde el primer momento, y con la disculpa de la Crisis... le invitan a coger la puerta y marcharse...

Bajó a la calle, hacía un frío que pelaba, era el viento, que se colaba en los cruces de las calles como si todas las puertas de la ciudad estuvieran abiertas de par en par, provocando una corriente de aire que helaba hasta las ideas, pero eso era precisamente lo que necesitaba... no pensar.

Miró hacia arriba, intentando ver el cielo. Se hacía complicado con aquellos edificios cada vez más y más altos, siguió caminando hasta atisbarlo en uno de esos cruces con viento incontrolado. Estaba nublado, de hecho justo en ese momento empezaron a caer las primeras gotas de una lluvia fina y heladora.





Fotografía: obra de Anselm Kiefer
www.youtube.com/watch?v=IzBy6agXKoA (de parte de Javi Duque)

domingo, 22 de marzo de 2009

Bruce Chatwin; "Los trazos de la CANCIÓN"

Bruce Chatwin (1940-1989) fue durante una década uno de los niños mimados de Sothebys, la prestigiosa casa de subastas de arte de Londres, hizo una carrera brillante en contra de su voluntad, solo para satisfacer los deseos maternos. Unas navidades despertó en casa de un amigo, completamente ciego. Su médico, a sabiendas de que no se trataba de nada orgánico, le recomendó un viaje, y se fue a Sudan para reponerse, de lo que parecía ser una crisis nerviosa y vocacional. Se quedó en aquel país africano más de cuatro meses y de alguna manera nunca más volvió. Su pasión por los viajes, su talento literario y su imaginación le han dejado en el grupo de los grandes escritores viajeros anglosajones. "Los trazos de la CANCIÓN", es una novela, un libro de viaje, que se desarrolla en el subcontinente oceánico. Nos habla del pueblo aborigen australiano donde consideraban a su país como una inmensa partitura musical: "allí donde pisan pueden cantar canciones inmemoriales que hacen surgir el paisaje, otorgan derechos territoriales, tornan posible el trueque simbólico y permiten expresar el alma del cantante". Hay además en este libro una colección de aforismos, que le convierte en un texto singular y mágico. "Robert Burton-sedentario y erudito rector de Oxford- consagró muchísimo tiempo y estudio a demostrar que el viaje no era una maldición, sino un remedio para la melancolía o sea para las depresiones que causaba la vida sedentaria: Los mismos cielos giran continuamente, el sol se levanta y se pone, la luna crece, las estrellas y los planetas mantienen su movimiento constantes, los vientos siguen removiendo el aire, las aguas refluyen y fluyen, sin duda para conservarse, para enseñarnos que debemos estar permanentemente en movimiento". The Anatomy of Melancholy "Los Trazos de la canción" Bruce Chatwin. Muchnik Editores S A Fotografía: Arte aborigen australiano, obra de Lindsay Bird Mpetyane

miércoles, 18 de marzo de 2009

King´s Library, la gran sala de las Maravillas


La biblioteca del Rey Jorge III, 1760-1820 "King´s Library", fue el nombre original de la gran sala donde se ubicó la colección real de aproximadamente 60.000 libros que fue donada a la nación por su hijo Jorge IV .

La sala fue construida a principios del siglo XIX, sus medidas apabullan; 91 m. de larga por 12 de ancho y una altura de 9m.

En el año 2000, después de un largo y costoso proceso de restauración que finalizó en el año 2003, la mayor parte de los libros fueron trasladados a un nuevo edificio, específicamente destinado a Biblioteca, (The New Britisih Library building at St. Pancras, London) y la sala Nº 1 del Museo Británico se rebautizó como Enlightenment Gallery, (Galería de la Ilustración). Una enorme caja de sorpresas que contiene miles de objetos que pertenecieron a grandes coleccionistas, anticuarios, viajeros, naturalistas ... todo dispuesto y ordenado en vitrinas para que el público comprenda el mundo de aquella época. Es además una brillante introducción al Museo y a sus colecciones.

En sus casi 200 m. de vitrinas se encuentran libros de viajes, partituras de música, distintas ediciones de las obras completas de Voltaire, muestrarios de mármoles de todos los colores, verdes, verdosos, azulados, turquesas, rojos, rosados, con vetas, amarillos, moteados, marrones, jaspeados, blancos, grises y negros... porcelanas, bronces, bustos de mármol de emperadores, de dioses, de reinas, pinturas, miniaturas, colecciones interminables de jarrones griegos, piedras preciosas, semipreciosas, objetos de plata, orfebrería, fósiles de animales nunca vistos, insectos atrapados en ámbar purísimo, máscaras africanas, fetiches traídos de todo el mundo, puñales, espadas, relojes, zapatillas chinas, sandalias japonesas... y entre toda aquella baraúnda de objetos para un gabinete de las Maravillas, me topé con dos piezas de lava, que habían pertenecido a William Hamilton, un diletante de clase alta que vivió en Nápoles durante 36 años y sucumbió al hechizo del Vesubio. Su fascinación por la montaña, se convirtió en obsesión y durante esos años completó un seguimiento minucioso de la actividad del volcán, dando puntual información a la Real Academia de Ciencias Inglesa y a su rey Jorge III.

William Hamilton, se casó en segundas nupcias con Emma, una mujer notablemente, notable, que posteriormente fue la amante del Almirante Lord Nelson, y mucho, mucho tiempo después, los tres, fueron elegidos como protagonistas de una novela histórica, escrita por Susan Sontang, "El amante del Volcán" , (absolutamente recomendable).

Nada más. Esto es lo que puede dar de sí, incluso mucho más, un día en el British Museum of London.


Fotografía: Emma Hamilton, al fondo el Vesubio. Obra de Vigee Le Brum.

lunes, 16 de marzo de 2009

Darwin 1809/2009. Natural History Museum. London




En el bicentenario del nacimiento de Darwin el Natural History Museum de Londres acoge una apasionante exposición sobre la vida de éste científico y el desarrollo de su Teoría de la Evolución.

La principal aportación histórica de esta teoría de la evolución, ha sido acercarnos al conocimiento del desarrollo y diversificación de la vida en la Tierra, y el lugar que ocupa la humanidad en la Naturaleza.

Los mecanismos evolutivos son la base de actuales e innovadoras investigaciones científicas y médicas de gran importancia social.

Dentro del largo periodo de estudio y desarrollo de su teoría de la evolución natural de las especies, Darwin observó en las expresiones de las caras de las gentes, y en el lenguage de perros, gatos y simios, la evidencia de la evolución; desacuerdo, sorpresa, terror, sufrimiento, disgusto, pasividad, desden, indignación, dolor...

Como "confesar un asesinato", así dicen se sintió Darwin, cuando decidió por fín editar su teoría de la evolución, veinte años después de finalizar el viaje de cinco años en el Beagle, donde tuvo ocasión de observar, recoger pruebas y desarrollar el metodo científico. Sabía que la edición de su teoría, le enfrentaría gravemente con los estamentos tradicionales de la Iglesia Anglicana, como así sucedió.



Fotografía: pfp, Natural History Museum. http://www.nhm.ac.uk/



viernes, 13 de marzo de 2009

Gao Xingjian, en el WÜRTH, La Rioja




Galardonado con el Nobel de Literatura en el 2000, Gao Xingjian es un hombre polifacético, además de novelista, dramaturgo y ensayista dirige cine y teatro y además es reconocido internacionalmente como artista plástico.


"pinto cuando no puedo seguir escribiendo, escribo cuando no puedo seguir pintando"


"La imagen artística, por sencillas que sean sus formas, es superior a las palabras. El arte depende de la imagen y no se puede separar de las formas. Las formas son el lenguaje del arte, son el fundamento de la creación de las imágenes artísticas, las cuales pueden actuar de manera independiente"


Fotografía: obra de Gao Xingjian


Pd: Maras y Victor , dedicada la entrada a vosotros dos; gracias por el catálogo, precioso y muy interesante.


lunes, 9 de marzo de 2009

Alberto Burri


Alberto Burri nace en Città di Castello (Perugia, Italia) el 12 de marzo de 1915. Se licencia en Medicina en 1940 y, siendo oficial médico, cae en manos de los aliados en Túnez en 1943. Se le envía entonces al campo de Hereford, en Texas, donde comienza a pintar.


Su tendencia creativa surge inmediatamente posterior a la Segunda Guerra Mundial, cuando un gran grupo de artistas se repliegan sobre si mismos, sobre sus acciones, y sobre la materia pictórica en si misma.


Su estilo muy personal, consiste en la elaboración de una poética de, la materia como instrumento de expresión.


Conocedor de los materiales, de su peso, su color, su intensidad de luz, su estructura y su grado de resistencia, utiliza sacos, maderas, hierros, plásticos, aglomerados industriales, trabaja con ellos agrediéndolos, modificándolos, manipulandolos incluso, deformándolos con calor y fuego.


Su trabajo es fuertemente contestatario, enfrentándose a la naturaleza decorativa de la abstracción, que dominaba en la Europa de post-guerra.


Es evidente un cierto paralelismo con Antoni Tapies por el empleo de materiales en bruto, hasta ese momento ignorados por el arte, y exentos de toda connotación estética y plástica.






Fotografía: Obra de Alberto Burri,

jueves, 5 de marzo de 2009

Modigliani, una estrella fugaz



En la vida y sobretodo en el arte hay figuras que aparecen en la tierra y queman las etapas de su existencia como meteoritos.


Amedeo Modigliani (1884-1920), parece una de esas figuras. En su vida se dá cuanto es necesario para hacer de ella un mito, belleza seductora, bohemia, pobreza, tuberculosis, ajenjo, droga, ("consumía de todo para llegar al fondo del alma"), mujeres, muerte prematura, y trágico suicidio de su mujer (Jeanne Hébuterne).


LLegó a París desde Italia, y vivió allí casi ininterrumpidamente, mientras se sucedían los acontecimientos más revolucionarios de la pintura moderna, desde el fauvismo al cubismo, desde la metafísica al surrealismo, vivía a dos pasos donde el mismo año de su llegada a París, 1906, Picasso pintaba Les Demoiselles d´Avignon creando una auténtica revolución en la pintura.


Modigliani se distanció de los movimientos vanguardistas, y en su ansiedad vital, todo lo que aferró de ellos, sólo le sirvió como punto de partida para una búsqueda personal y marginal, en un proceso autodestructivo. Permaneció fiel a sí mismo, de tal forma que su arte comienza y acaba con él.


En su contra puede decirse que le falta estilo por exceso de estilización, excesivamente decorativo, amanerado, superficial, repetitivo, pero no se puede negar la intensidad de vida que transmiten sus retratos más hermosos, o sus desnudos; sensualidad e inocencia, inquietud y provocación, ironía y amor.


Es a través de su pintura que podemos recorrer la secreta y ardiente intimidad de su vida.



Fotografía: obra de Amedeo Modigliani. Desnudo 1917




Dedicado a Gloria. (no es un dulce Murillo, pero parece un dulce sueño. Besos Glorichu).






lunes, 2 de marzo de 2009

mierda de artista (con perdón)

Vanguardia artística italiana desde la segunda posguerra a los años Sesenta.

"Durante los años de la segunda posguerra los artistas italianos se plantean el problema de salir definitivamente del aislamiento cultural, impuesto en primer lugar por la dictadura fascista y después por la guerra. Los intentos del régimen por edificar una estética oficial, aunque no tuvieron un éxito completo, dejaron, una situación cultural de atraso que se pretendía resolver.

A pesar del esfuerzo generoso por ponerse al día , no emergieron experiencias artísticas realmente innovadoras; es más cuando éstas surgen en torno a 1947, son recibidas con desconfianza, e incluso con sordas oposiciones e intentos de ridiculizarlas, lo que impedirá durante mucho tiempo que las investigaciones artísticas más avanzadas fueran plenamente valoradas.

Estas resistencias provienen de la crítica oficial y, en general, de las instituciones culturales. Inmediatamente después de la guerra, Italia muestra ya la que será siempre su debilidad, es decir, el desinterés por el arte contemporáneo. El trabajo artístico es promovido, organizado y divulgado gracias a la actividad de un mercado privado pionero, y sobretodo a la actividad de los artistas mismos, que se organizan por su cuenta y dan lugar a grupos que redactan manifiestos programáticos, promueven exposiciones, abren y organizan salas, de acuerdo con la tradición de muchas vanguardias artísticas."

Giorgio Verzotti. Arte Italiano desde las primeras vanguardias a la posguerra. Centro de Arte Reina Sofía.



"A menudo se oye decir a la gente que no entiende el arte contemporáneo, pero que acepta el arte del pasado; todo esto nace de un equívoco fundamental en relación al arte mismo, y uno puede estar seguro de que las personas que hablan de este modo no entienden nada, ni del arte del pasado ni del contemporáneo. Ya que entendámonos, comprender un cuadro o una obra de arte no significa entender el tema, sino asumir su significado; la pintura pretende comunicar, no ser un lujo en función del mobiliario; un cuadro es, y lo ha sido siempre un objeto mágico, un objeto religioso.
Sólo que los dioses cambian, cambian continuamente, se transforman con las transformaciones de las civilizaciones, puesto que cada instante, es un paso es una nueva civilización que nace.

El artista es el vaticinador de estas nuevas condiciones humanas; descubre nuevos totems y tabúes, de los que su época posee en sí el germen pero no aún la conciencia".



Piero Manzoni. "Prolegómenos para una actividad artística", en "Scherven" nº3 Amsterdam marzo, 1967




"Inédito y productivo, Manzoni demuestra el conocimiento y la valoración de la propia materia corporal. Al final de una aventura, que ha implicado en profundidad a la materia, un artista italiano se topa con esta evidencia elemental: También nuestro cuerpo se revela productor de materias, del aliento a la sangre, hasta las heces. Manipulados oportunamente y metidos en botes, seran expuestos en los más ilustres museos del mundo (...)"


Alberto Boatto. Memoria del futúro. Centro de Arte Reina Sofía



Fotografía: obra de Piero Manzoni