sábado, 7 de junio de 2008

invisible azul visible, Yves Klein

...la linea puede ser infinita como el espíritu lo es, pero no tiene la cualidad de llenar el todo inconmesurable, solo el color... el arte de pintar consiste en dar libertad a la materia. Un cuadro como lo entendemos en general es para mi como una ventana de una carcel, donde las líneas los contornos la formas y la composición son los barrotes.


Las lineas concretan nuestro estado mortal, es nuestra vida afectiva, nuestro razonamiento , nuestra educación , ellas son nuestras debilidades y deseos, nuestras facultades y artificios.


El color por contra, tiene una medida natural y humana, nos baña en una sensibilidad cósmica. El color es la sensibilidad hecha materia en su estada primordial.


L' aventura monocroma D. Riout

Fotografía: obra de Yves Klein

(entrada dedicada a mi amigo Arturo)

7 comentarios:

Anónimo dijo...

Me has hecho pensar mucho... pero ¿qué hay más allá del color, más allá del pensamiento? No será lo ine-fable, lo que no se puede expresar con palabras... ¿qué es?

pfp dijo...

en este caso el que nos hace pensar es Yves Klein detras de esos lienzos azules, pintandos a rodillo....
el color nos ayuda a expresarnos cada día, no hace falta ser artista, solo nos hace falta abrir el armario y elegir el color del vestido, la camisa, o la corbata que nos identifica con nuestro estado de ánimo con lo que no podemos o no queremos expresar con palabras, como bien dices con lo ine-fable...

Barbebleue dijo...

Y nada más primordial que el azul cósmico...
El color existe por la luz, es parte de ella, su descomposición. Y ahí su nexo con lo intangible, lo inefable, lo vivificador. Pero nuestros sentidos responden a los contrastes, las alteraciones: un único estímulo acaba siendo obviado. Ocurre igual con el sonido, que también tiene color ¿no es el cromatismo un poderoso recurso expresivo?
Profundizando ¿no es acaso el Arte la gran y única aportación humana? El nexo de unión con la divinidad, entendida como inmortalidad suprafísica, deseada y desconocida.
¿Se puede explicar? ¡Mejor, no!

Gracias, Pilar, tus últimas entradas son "divinas"

Anónimo dijo...

Gracias Pilar. Me gusta lo que dices y gracias Barbebleau, yo no sabría expresarme como tu pero creo que lo siento así...

pfp dijo...

gracias a ti bbb, tus comentarios al respecto también son "divinos"

Anónimo dijo...

Los insistentes y monocordes tres sonidos con que empieza el primer movimiento de la sonata del Claro de Luna de Beethoven, son como los puntos suspensivos que van camino del nexo con la divinidad…Y la vida vivida desde su esencia, desde el aroma que diviniza, no es también Arte? No hay nada que pueda explicarse si no es desde esa esencia inefable…

pfp dijo...

Josefina voy a localizar ese claro de luna de Bethoven...Besos