Curiosidad, extrañeza, contrariedad, fascinación, admiración, belleza, voluntad, respeto, añoranza, crispación, inquietud, indignación, cabreo, rebeldía, angustia, cansancio, tristeza, serenidad, esperanza...
Todo esto puede leerse en la cara de los rusos y de las rusas de hoy en día, todo esto y mucho más...
Ha sido un magnifico verano en su compañía. Espero volver.
Fotografía: pfp, Moscú, Torre de la Trinidad en la muralla del Kremlin. Por la puerta de esta torre, entró triunfante Napoleón en 1812 y por ella salió derrotado un mes después.
4 comentarios:
Siempre, al pensar en los rusos, me sostiene la literatura de Dostoievski: a través de sus personajes, intuyo un carácter de pasiones volcánicas, de reflexiones profundas, de contradicciones, de atracción por lo abismal, el todo o nada del alma rusa.
Tal vez todos los rasgos que transmites quieran decir lo mismo que mis intuiciones, pero creo que tienen mucho en común con nosotros…
He disfrutado mucho de esta serie. Siento el alma rusa a través de su modélica literatura, de su maravillosa música. Las pinturas anteriores al viaje me mostraron un poco más y los reportajes posteriores, con sus correspondientes fotos para una exposición, han sido un aliciente casi diario.
Digo Volga i digo Beso.
GLoria, Josefina, gracias a las dos por vuestra atención y comentarios.
Besos a las dos
Buenoooo Pilar,
Que viaje tan interesante que has hecho este verano, y cuantas cositas nos cuentas.
Hacia tiempo que no pasaba por aqui, porque acabo de volver de la playa, y llevo un buen rato leyendo todas tus impresiones de ese pais.Han estado muy bien y tu forma de describir lo que se lee en la cara de los rusos, tampoco es tan diferente de lo que se lee en los de nuestro pais.
Tengo ganas de hacer ese viaje, lo tengo pendiente.
Besitos
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