lunes, 27 de octubre de 2008

Neruda, hombre generoso


Pensé entregarme a mi trabajo literario con más devoción y fuerza. El contacto con España me había fortificado y madurado. Las horas amargas de mi poesía debían terminar. El subjetivismo melancólico de mis Veinte poemas de amor o el patetismo doloroso de Residencia en la tierra tocaban a su fin. Me pareció encontrar una veta enterrada, no bajo las rocas subterráneas, sino bajo las hojas de los libros.

¿Puede la poesía servir a nuestros semejantes? ¿Puede acompañar las luchas de los hombres?. Ya había caminado bastante por el camino de lo irracional y de lo negativo. Debía detenerme y buscar el camino del humanismo, desterrado de la literatura contemporánea, pero enraizado profundamente a las aspiraciones del ser humano.

Comencé a trabajar en mi Canto general . Para esto necesitaba un sitio de trabajo. Encontré una casa de piedra frente al océano, en un lugar desconocido para todo el mundo, llamado Isla Negra. (...)

La costa salvaje de Isla Negra, con el tumultuoso movimiento oceánico, me permitía entregarme con pasión a la empresa de mi nuevo canto.

Pero la vida me sacó de inmediato de allí. Las noticias aterradoras de la emigración española llegaban a Chile. Más de quinientos mil hombres y mujeres, combatientes y civiles, habían cruzado la frontera francesa. (...)

El Gobierno del Frente Popular de Chile decidió enviarme a Francia a cumplir la más noble misión que he ejercido en mi vida: la de sacar españoles de sus prisiones y enviarlos a mi patria. (...)

Casi inválido, recién operado, enyesado de una pierna -tal eran mis condiciones físicas en aquel momento- salí de mi retiro y me presenté al presidente de la república. Don Pedro Aguirre Cerda, me recibió con afecto.

- Sí, tráigame millares de españoles. Tenemos trabajo para todos. Tráigame pescadores, tráigame vascos, castellanos, extremeños...

Y a los pocos días, salí para Francia a buscar españoles para Chile.


Pablo NERUDA, " Confieso que he vivido"





Dedicado a Chile, a los chilenos y sobre todo a Pablo Neruda, donde esté, con cariño.



Fotografía: mapa America del Sur, costa de Chile

11 comentarios:

Anónimo dijo...

!Qué maravilla Pilar! Cuánto me ha gustado, no lo sabes bien...han aflorado las lágrimas en mis ojos, lágrimas que envío a Pablo Neruda donde esté, como testimonio de mi admiración y mi amor por la poesía. Creo que su duda queda contestada en mí. La poesía es como la oración, uno se pregunta ¿servirá a algún ser humano? Y he aquí la sorpresa: siempre ha sido y siempre será, compañera de camino sin saberlo...

Teresa G. dijo...

Para mi, NERUDA es todo un universo. Leí, curiosamente, sus hermosísimas memorias, Confieso que he vivido, antes que su poesia. Mis padres me regalaron ese libro cuando cumplí quince años.

Creo que mucho de lo que he leído, vivido, sentido y esperado de la vida después tiene que ver con esa lectura adolescente. Me toca en lo más hondo. Gracias por volvérmelo a recordar.

Y, pasando a lo práctico, a ver si coincidimos algún dia por Barcelona o Madrid, o donde sea, tengo muchas ganas de conocerte. Ya se lo he dicho algunas veces a un amigo común, pero no hay manera...

pfp dijo...

Teresa, no lo dudes, por mi parte haré lo que pueda por vernos la próxima vez en Bcn. Atuercaré a quien haga falta
Y gracias a tí por entrar en el blog, no te pierdas el proxima post que te va a gustar también. Besos
Josefina ¡CRACK¡, besos también.

Joaquim dijo...
Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.
Joaquim dijo...
Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.
pfp dijo...

Joaquim tranqui, me he dado cuenta del error, te voy a dedicar un poema de Neruda para ti solo, para que te me calmes y no entres al trapo a los que no vale la pena entrar. Un superabrazo de tú amiga Pilar que te quiere "la tira bordada"

Barbebleue dijo...

Con Neruda el Arte se hace humano, o lo humano se hace Arte.
¡Bendita veta!

glòria dijo...

Neruda estaba prohibido en los sesenta. Aparecían sus libritos, me refiero al tamaño, importados por libreros audaces y muchos sabíamos dónde encontrarlos. Eran de Editorial Losada, Buenos Aires. Leer a Neruda a los diecisiete años me descubrió el poder del lenguaje, cómo son las palabras en manos de un artista que mezcla sabiamente las piedras y el amor.
Pilar, ya estoy aquí otra vez. Te he recordado y he deseado que llegara este momento para volver a escribirte.
Gracias a tu abrazo y al tiempo mis huesos van eliminando el rencor de un golpe bajo que ya ha cumplido ocho semanas.
Te abrazo yo a ti con gran afecto.

pfp dijo...

Bravo Gloria¡¡ que bien, de vuelta. Ya puedes ponerte a contar cosas ¿vale? yo te mando también un abrazo de BIENVENIDA y a ver si nos lo podemos dar pronto de verdad.

Joaquim dijo...

Pilar, Mei me ha metido en esto y yo no puedo dejar de citarte.
Un petó

http://ximo.wordpress.com/2008/10/30/i-tagged/

pfp dijo...

Joaquim estoy encantad y honrrada como no. Cualquier día te envió una liebre, te la has ganado. Besos a tutiplé.