jueves, 18 de marzo de 2021

malestar mental


A propósito de la acertada intervención de, Iñigo Errejón ayer en el Congreso de los diputados, enlazo con la próxima exposición del Malba (Buenos Aires): Terapia, exposición que ofrecerá una lectura del arte argentino durante la Pandemia.

Me pregunto, cómo definirá la historia del Arte del futuro, la creación artística fruto de esta terrible experiencia que estamos viviendo, donde la fatiga crónica, la depresión, la ansiedad, el miedo y aislamiento social, dominan nuestra vida diaria. Me pregunto qué características plásticas serán capaces de resumirla.

Desde el siglo XIX, la Medicina moderna, ha orientado a los enfermos mentales, hacia la práctica del arte como terapia. El arte en sus diferentes expresiones, pintura, música o literatura, explora en el inconsciente de la persona, permitiendo que se exprese, que encuentre una solución a sus ansiedades, bloqueos y traumas y mejore su salud mental.

Las exposiciones, generan nuevas maneras de contemplar y expresar la realidad, agitan el debate creativo, y manifiestan los significados culturales y sociales del arte. Observemos y aprendamos también de ellas.


Imagen: Dibujo, Claudia del Río. Rosario 1957, Argentina







miércoles, 10 de marzo de 2021

Amy Sherald




               Amy Sherald, 1973 Georgia Estados Unidos. 

Pintora afroamerica, realista; sus retratos, protagonizados siempre por  gente negra, anónima, cotidiana, son expresivos pero contenidos. Destacan sobre un fondo monocolor y prendas llamativas, muy coloristas. Sin embargo pinta los rostros en tonos grises, neutros, que aportan atemporalidad a los personajes que retrata. Ella misma explica que utiliza la grisalla en los rostros, para eliminar la raza en sus pinturas, de esta forma además, evoca las primeras fotografías, a través de las que las personas negras, que habían sido excluidas en gran medida de la pintura norteamericana, se unieron a la cultura visual estadounidense.

En 2016 se convirtió en la primera mujer afroamerica en ganar el Concurso de retratos Outwin Boochever, de la National Portrait Gallery de Washington  DC. Al año siguiente fue seleccionada por la ex primera dama Michelle Obama para pintar su retrato oficial.


Imagen: Amy Sherald






lunes, 8 de marzo de 2021

Labene

 


Una historia ya contada.


La bautizaron María Benedicta, pero todo el mundo le llamaba, Labene. Ella fue la primera de la escalera que allá por los años 80 tuvo que buscarse la vida, cuando su marido una noche se fue a comprar tabaco y nunca más volvió. Su hijo, entonces, tenía solo 8 años y ella sabía que habría mucha necesidad por delante, así que ni lo dudó cuando un familiar, le propuso la limpieza de un despacho de abogados en el centro de la ciudad.
Pronto, se acostumbró al horario de trabajo nocturno, salía de casa cuando las demás volvían, pero eso le hacía sentirse diferente, y cuando se marchaba dejando a su hijo cenado, soñaba que salía al cine o al teatro como las señoras bien. 
Al cabo de un par de años, los abogados ampliaron el despacho y contentos como estaban con ella, dejaron a su confianza traer otra mujer que le ayudara. Labene se sintió halagada e importante, y no lo pensó dos veces, le ofreció el trabajo a Langelita, su vecina de rellano, a la que debía muchos favores de intendencia, y sobretodo, la tranquilidad de dejar a su hijo pared con pared.

Langelita, bautizada, Maria de los Angeles, tenía un marido que era un pan de molde, pero cortito, no pelecharía nunca en el trabajo, y ellos eran cuatro de familia y con buen apetito, a los chavales les crecían los pies de mes en mes.. así que ni se lo pensó, acepto encantada.

Pasados unos meses, la vecina del 1º C, bautizada María Francisca, pero conocida en todo el barrio como, Lapaqui, les abordó en jarras. Necesitaba trabajar, su marido solo salía del bar para comer, cenar y dormir; estaba pensando seriamente en la separación... Tuvo suerte Lapaqui, el despacho de abogados, viento en popa, amplió sus oficinas de nuevo, y otra vez recurrieron a Labene, que con su buen hacer les resolvió la papeleta.

Casi sin sentir, habían pasado quince años trabajando juntas: Labene, Langelita y Lapaqui (divorciada), cuando un 19 de noviembre decidieron celebrar el 50 cumpleaños de Labene. Era un martes normal de trabajo, y Labene, ya de madrugada, les obsequió con una bandeja de charcutería fina, y quesos para untar. Lapaqui y Langelita compinchadas con el guarda-jurado, la sorprendieron con una botella de champán y un precioso pastel con 50 velas de colores. Lo pasaron en grande, brindaron por la amistad, por la suerte de compartir el trabajo y por la vida.

Como siempre, al volver a casa, cogieron el metro, el vagón se fue vaciando paulatinamente en cada estación que paraba, ellas como siempre bajaron en la estación término, iban alegres y chisposas por el champán. Ninguna de las tres se percató que al otro extremo del vagón en dirección contraria a la marcha, viajaba un hombre que parecía dormido, pero estaba muerto, hacía casi cuatro horas que iba y venía en un viaje sin final. Pero esa es otra historia.

para Cristina, con cariño Pilar


Imagen: Las Tres Gracias. Pedro Pablo Rubens



jueves, 4 de marzo de 2021

Vita Sackville-West




 Vita Sackville-West, más conocida como Vita, nació en Kent, Gran Bretaña, en 1892. Su padre fue el tercer barón Sackville y su madre,  hija ilegítima de Lionel Sackville y la bailarina malagueña Josefa Durán, más conocida como Pepita Oliva

Formó parte junto a su marido, el diplomático y editor Harold Nicolson, del conocido grupo Bloomsbury de intelectuales y artistas. Vita desarrolló una activa vida intelectual y social; fue amante de la también escritora Violet Trefusis con la que realizó, travestida, un viaje por Francia. El aire andrógino de la aristócrata es hoy considerado como la inspiración de la célebre novela de  Virginia Woolf, -de la que también fue amante- Orlando

Desarrolló su actividad creativa como novelista, poeta, cuentista, biógrafa, viajera, historiadora y célebre diseñadora de jardines.

Publicó su primera novela, The Heritage, a la edad de veintiséis años. y algunas de sus obras más conocidas son: The Edwardians, (editada en español por Tusquets), All Passion Spent, Family History y Seducers in Ecuador. De su poesía cabe destacar The Land, que obtuvo el Hawthornden Prize y The Garden, que consiguió el Heinemann Prize.


Imagen: Lady Whit a red hat, 1918 óleo por William Strang