lunes, 30 de marzo de 2020

Herbert Boeckl


Imagen: Herbert Boeckl, óleo sobre lienzo 75x58 1948.

Mitad máscara, mitad retrato macabro e irónico, sonriente y desesperado, este retrato trastoca nuestras categorías habituales. Rostro sólidamente labrado a partir de un empaste que tiene la solidez de una roca, donde se abren tres vacíos, la zona que cubre las fosas nasales, la boca y los dos ojos. Una cabeza que oye, escucha, y siente. 
Su cromatismo apagado en los grises y en los verdes del fondo, deslumbra y sorprende en los anaranjados y los amarillos del rostro.

Herbert Boeckl (Klagenfurt 11894-Viena 1966), contemporáneo de Oskar Kokoschka, es deudor de su estética: expresión, violencia del color y espesor de la materia.

Fuente del texto:RETRATOS. Obras maestras. Centre Pompidou.




2 comentarios:

Fackel dijo...

Pose de Goya, rostro de Solana, fuerte color rojo anaranjado expresionista, la cara se desprende o cae en la penumbra del cuerpo. Tal vez diez o quince años antes el rostro hubiera sido otro, heredó una actitud cínica en el retrato. ¿No fue de los pintores perseguidos por el nazismo?

pfp dijo...

ya ves, Fackel, dicen que en su autorretrato, el autor evoca a Rembrandt anciano (en la colección del Museo Wallraf-Richartz de Colonia.) cuyo interés por el pintor fue progresivo sobretodo al final de su carrera

no tengo muchos datos de Herbert Boeckl al que hasta hace poco no conocía. Parece que durante las duras contiendas europeas, desarrolló un exilio interior. Fue católico ferviente pero también antirreaccionario, liberal, y progresista y que representó una fuerza moral con la que muchos de sus compatriotas pudieron identificarse.

salud, Fackel!